A una de esas personas con esa característica de innovación e ingenio que admiro tanto, se le ocurrió hacer algo diferente: un guante con el cual el portador va a poder jugar al piedra, papel o tijera.
Si bien el invento puede parecer algo estúpido e inútil, es un juguete que seguramente le costó bastante crear, porque a pesar de ser un juego simple el armar esto resulta en un grado de complejidad enorme. Por qué? El guante tiene que ser capaz de “leer” los movimientos de quien lo tenga puesto, provocando entonces la necesidad de utilizar acelerómetros. Hay que saber también qué es lo que eligió la “computadora” cuando juegue con nosotros… entonces al guante y acelerómetros, agreguémosle un display. Y, por supuesto, lo que faltaba: el guante empieza a aprender de los movimientos del portador, “estudia” sus elecciones preferidas, para luego basarse en ellas para tomar una decisión acerca de qué jugar.
Como el creador del guante es buena onda, decidió postear exactamente todos los pasos e instrumentos necesarios (tip: usa una placa arduino 😉 ) para hacerlo. Vía Crunchgear.