Ya habíamos dicho en su momento que, definitivamente, este no es un buen año para Sony. En la primer mitad del año sufrieron embates constantes de diferentes grupos de hackers, que al menos una vez por semana atacaban alguno de sus sitios (teniendo sitios localizados en casi todo país del mundo, no era algo complicado de hacer). Tuvieron, además, grandes dificultades con el tsunami de Japón, que los obligó a detener las operaciones de una de sus plantas por reparaciones, y de otras seis por cortes de energía en el país.
Ni hablar que, hace poco, ganaron el premio Pwnie al “EPIC FAIL”. Claro, Sony era la única nominada en la categoría por muchos de los problemas que tuvo durante el año (demanda contra GeoHot, pérdida de información de cuentas de Sony Online Entertainment, caída de la PSN, despedida de empleados de seguridad de redes, etc.), asi que tenía el premio asegurado.
Y ahora, con los disturbios en Londres, se ven nuevamente en un problema. ¿Por qué? Al estar los agitadores prendiendo fuego todo lo que se les cruce, lo hicieron también con un almacén que la empresa tiene en Londres. El almacén, de 20.000 metros cuadrados, servía para guardar CDs, DVDS, BluRays y juegos de PS3; la compañía ya confirmó que esto afectará el abastecimiento del país.
Está claro que con lo de Londres y Japón hubo/hay en juego problemas muchos importantes que la situación de una compañía, pero al menos a mí no me deja de provocar cierta lástima que le sigan sucediendo estas cosas. Tal vez ese sea uno de los problemas de la globalziación y la omnipresencia de una empresa: tener que afrontar este tipo de situaciones poco probables (pero que sin embargo se están dando) en cualquier parte…
Vía Electronista.
