La -perdón por traducir- Estrella de la Muerte ha ganado protagonismo en las últimas semanas por diversos motivos. El gobierno de Estados Unidos implementó un sistema de participación ciudadana bastante interesante llamado “We The People” (Nosotros el pueblo), donde la gente presenta proyectos que considera útiles para ayudar a mejorar a la comunidad y, de alcanzar una cantidad de firmas suficiente (inicialmente 5.000, luego 25.000 en 2011 y 100.000 recientemente), el gobierno responderá oficialmente a dichos pedidos, ya sea con una negativa a tratarlo como una promesa de realizarlo.
Un sistema de este tipo es bastante importante porque permite finalmente que los ciudadanos puedan presentar proyectos de manera fácil (tengamos en cuenta que en Argentina cualquier ciudadano puede presentar también un proyecto de ley, pero probablemente esto requiera bastantes pasos burocráticos que la mayoría no estaría dispuesto a seguir), volviendo entonces muy fácil el poder colaborar de algún modo, pudiendo entonces acallar los comentarios de “Es muy fácil criticar todo detrás de un monitor”, o “Si no te gusta metete en política y cambialo” 😀 .
A pesar de la poderosa herramienta, a veces las cosas se encaminan por el lado oscuro… y así es cómo un ciudadano propuso que el gobierno debería asegurarse el presupuesto para comenzar a construir la Death Star a partir de 2016.
Se imaginarán que una petición así no puede ser tomada en serio por nadie… sin embargo, alcanzó rápidamente las firmas necesarias (creo que después de ese hecho fue que subieron el umbral de 25.000 a 100.000 😀 ), y requirió que el gobierno responda oficialmente, con un comunicado lleno de referencias geeks sobre Star Wars; el Imperio también se vio obligado a responder a los hechos, para demostrar su superioridad frente al planeta tierra.
La gente, por supuesto, no se contentó con la negativa (¿quién podría hacerlo?), así que llevaron el proyecto a Kickstarter 😀 . Allí podemos ver un sketch de la Death Star, que necesita 20.000.000 libras esterlinas para llevarse a cabo – una meta lo suficientemente alta como para que nunca se alcance (aunque ya juntaron casi 74.000 😀 ) y que Kickstarter entienda que es una broma. ¿Conseguiremos construirla?
Vía Techcrunch.