Hace bastante que vimos cómo Valve se encontraba experimentando con biofeedback, el poder utilizar otra información que brinda el cuerpo a la hora de utilizar un juego. En su momento, prestaban atención al sudor y los latidos de los jugadores para poder reflejar esa información en el juego: mientras más nervioso, más difícil. Ahora, Ben Krasnow, otro empleado, se encuentra experimentando cómo utilizar otras partes del cuerpo para controlar un juego; en particular, nuestra boca y nuestro trasero.
El control del trasero es una especie de balanza de baño modificada que según dónde sense que el jugador está haciendo más presión, el juego realiza distintas acciones (ir para atrás, para adelante, moverse lateralmente).
El de la boca, parecido a un protector bucal, simplemente reemplaza a un mouse.
Hoy es claramente el día en que me dedicaré a los posteos de cosas rppoco prácticas 😀 . No creo que estos dos métodos de control sean utilizados por nadie en el futuro cercano ni lejano, parecen más que nada proyectos hechos en el tiempo libre de Krasnow, pero me resulta interesante de todas formas que haya tenido el ingenio suficiente como para realizarlos. Nunca se sabe con este tipo de cosas cuál “agarrará viaje” en la gente y se convertirá en the next big thing… eso sí, con estos controles por fin les podríamos decir a nuestros amigos, literalmente, que juegan como el culo 😀 .
Vía Engadget.
