Una pena enorme para un mercado que debería haber recibido más atención del público, el de los lectores de libros digitales con pantallas e-ink que, a mi gusto personal, son mucho mejores para la lectura que los LCD.
Pero Sony tuvo un problema, no sólo el producto era más caro, no tenía una cadena de distribución asociada como lo hacen B&N y Amazon.
El último modelo, el Sony Reader PRS-T3, se venderá hasta agotar stock y será el último de la marca. Era más caro que los rivales, eso le jugaba en contra. Sony fue la primera en utilizar e-ink con el Librié 1000-EP con pantalla de 6″ a 600×800 en 2004. Utilizaba cuatro pilas AAA y duraba unas 10.000 páginas, tenía 10MB de almacenamiento y utilizaba un slot de Memory Stick Pro, conector microUSB, teclado QWERTY y un costo, en aquella época, de USD 376, que eran muchos y hoy siguen siendo muchos para este tipo de dispositivos.
En 2008 habían lanzado el PRS-700 que combinaba el e-ink con touchscreen, era malo, pero la idea era excelente y fue mejorando modelo a modelo salvo algo, la tienda Sony Reader Store.
Curiosamente el Sony Digital Paper lanzado a comienzos de año seguirá vivo, el público es otro totalmente distinto y sólo acepta formato PDF de archivo.
Tengo un ebook comun marca papyre. Nunca vi algo tan fantastico en mi vida, es genial. Poder tener miles de libros en algo tan comodo, que se lee TAN bien… es genial. Pero la gente no entiende hasta que no ve uno, si le explicas lo que es tener una pantalla que se ve como una hoja no entienden lo fantastico que es
Sin dudas uno de los mejores inventos de los ultimos años.