Airbus hace aviones de pasajeros, satélites, cargueros y de todo un poco, pero también tienen un pequeño proyecto lateral que busca no sólo un record sino investigar corrientes de aires de gran altura.
Las ondas de montaña estratosféricas son un fenómeno poco estudiado pero a mediados de los 90s Einar Enevoldson, un piloto de pruebas de la NASA, se puso a investigarlas.
Estas ondas se provocan cuando una masa de aire choca contra una cadena montañosa y se eleva empujando a toda la atmósfera sobre ésta hacia arriba, en cadenas como los Andes se dan de forma seguida y estas ondas se elevan a altitudes poco comunes para la aviación.
El jet polar estratosférico es el que provoca estas ondas aquí en el sur, en 1999 fue Steve Fossett (el multimillonario que falleció en 2007 en un accidente aéreo) el que financió el Perlan Mission I y el 30 de Agosto de 2006, hace diez años, lograron alcanzar unos 15.5Km en un planeador pero el DG-505M utilizado no podía alcanzar las más altas capas.
El objetivo del Perlan II que presentó hoy Airbus en Argentina y que ya está viajando a El Calafate es alcanzar los 27.4 kilómetros aprovechando estas corrientes ascendentes, si, mucho más de lo que alcanza casi ningún otro avión y, para colmo, sin motor alguno.
El objetivo es superar la altitud de 2006 obviamente, para ello se tienen que dar las condiciones atmosféricas así que, según me explicó Jim Payne, jefe de pilotos, estarán al menos dos meses en la región tratando de encontrar ese día ideal, su sueño es alcanzar la meta para el 30 de Agosto, ya que se cumple una década del primer intento, pero hasta Septiembre seguirán allí.
El Perlan II tiene además varios instrumentos extra para medir cantidad de Ozono, humedad, temperatura (el planeador debe operar en temperaturas varias veces debajo de cero), dosímetros para medir radiación electromagnética (a esas alturas es como estar en un tomógrafo sin salir durante horas), LIDAR y demás sensores, toda la data será luego publicada de forma abierta para investigadores.
Esperemos el éxito de la misión, porque no es poca cosa alcanzar la cota de aviones como el U-2 y el SR-71 sin motores, y con un objetivo de largo plazo de estudiar la navegación aérea en atmósferas ínfimas con una mirada en Marte, aunque eso esté muy lejos en el futuro toda investigación e idea necesita un puntapié inicial.
Si la llegan a pegar con el día capaz hasta llegan a las Malvinas. Hace unos años un planeador de Bariloche aterrizó por Maquinchao (250 Km al Este) cuando se le hizo de noche. El día era uno de esos perfectos para volar y bajó porque ya no veía nada, en la cabina los instrumentos no tienen luz y el piloto no tenía ni una linterna.