Intel empieza a distribuir sus primeros procesadores de octava generación para notebooks y el Core i9-8950HK de seis núcleos es el primero que veremos de una larga lista de CPUs destinados a hundir el excelente intento de AMD por posicionarse como opción en portátiles. Es la lógica reacción del gigante.
Según la firma estamos hablando de 30% de mejora de performance comparando con los de i7 de séptima generación, el 8950HK es de lo más bestial que vamos a ver en notebooks con un clock base a 2.9GHz y boost hasta 4.8GHz, si, leyeron bien.
Obviamente estos 4.8GHz son “ocasionales” ya que el diseño del CPU es con un TDP de 45W así que semejante clock sólo se puede sostener por unos segundos, pero es todo lo que necesita, esos disparos de velocidad son ideales para el tipo de uso actual, para pequeñas acciones directas el CPU va al máximo (usualmente cuando sólo se usa un core de los seis) y para cómputo sostenido se mantiene el clock normal.
También se vienen nuevos i7, i5 y los i3 más accesibles pero como notarán la mayoría deja de lado los múltiples threads para poder ser más “baratos”, de todos modos un i3 a 3.1GHz y 4 núcleos con 6MB de Cache y un TDP de 35W (el menor modelo) sigue siendo superior a casi toda la oferta que hay en equipos instalados hoy en día donde la mayoría de las notebooks posee procesadores de la sexta generación o inferiores (sobraba stock parece)
Via Engadget