Bueno, no es sólo PlayStation la que tendrá versión renovada, como es sabido Microsoft también trabaja en su próxima XBox y el proyecto lleva el nombre clave de Scarlett y como estamos en semana de E3 obviamente estaban obligados a mostrar un poco y contar de qué va, por suerte lo hicieron aunque sea tan sólo un teaser generalista.
A favor que incluya a los developers por detrás de esta consola que viene con varias características para competirle de lleno a la PlayStation 5, para empezar también asociados a AMD para utilizar la arquitectura Zen 2 además de memorias GDDR6, en teoría según anuncian para poder otorgar video en 8K aunque probablemente esto no sea para juegos sino para cine.
Detaller interesante que hablen de Ray Tracing por hardware, algo que AMD no ofrece en sus placas pero sí lo hace la rival NVidia, también hablan de 120fps por lo que supongo que tendremos una fluidez a nivel gamer caro en una consola para el living, todo esto con SSD que es algo que Sony también anunció para su consola, la era de las consolas rápidas en serio está llegando porque es inevitable la distancia que les tomó la PC gamer en los últimos cuatro años.
Todo esto supuestamente la hará cuatro veces más potente que la XBox One X y hasta 40 veces más performante (supongo que se refieren a pasar a SSD con esto :P) y el año de lanzamiento será, como es esperado, 2020, fines del 2020, para las navidades del año que viene con Halo Infinite como juego inicial y soporte para el servicio de streaming de juegos de Microsoft.
El servicio de streaming se llama, por el momento, Project xCloud y es el verdadero tema para MSFT porque Google está empezando a pegar para todos lados con Google Stadia, pero aquí un detalle que le jugará a favor a Microsoft: uno podrá hacer streaming de sus propios juegos y su propia consola sin pasar por el server, algo que reduce la latencia de forma que jamás podría Google porque, claro, estaría en tu propia casa. Más allá de eso soportará más de 3500 juegos de XBox One desde un principio aunque no se conocen precios ni disponibilidad todavía.
La duda quedará en qué sentido tiene vender una consola si lo mismo se puede ofrecer por streaming, pero mi verdadera duda está en si los servicios de streaming realmente podrán ganarle a la latencia inevitable de las telecomunicaciones.