Google lanzará el Pixel 4 en algún momento de fines de año pero mientras tanto va mostrando las cualidades particulares de su teléfono y una de ellas tiene que ver con el proyecto Soli.
No es lo usual en Google esto de adelantar cosas pero está bueno para que podamos hablar un poco del producto (marketing!) y lo último se encuentra en la parte superior del bezel del teléfono ya no priorizando que sea todo pantalla infinita sino una serie de sensores muy particulares.
La cantidad es inusual pero tiene que ver con varias funciones, la primera es desbloquear el teléfono con el rostro, para esto utiliza dos sensores infrarrojos y un iluminador, funciona en cualquier posición y apenas uno toma el teléfono se desbloquea (no se si es lo que me gustaría, estoy acostumbrado a tomar yo esa decisión, pero ya saben, somos animales de costumbre), los datos que conforman la identificación de la cara quedan almacenados en el chip seguro Titan M y todo es procesado en el teléfono. Hay mucho para competirle al FaceID de Apple.
El sensor más interesante es Soli, el radar que detecta los movimientos, ya no es solamente por imagen, al ser un radar obviamente hay un componente volumétrico en todo esto que trabaja en la banda de 57 a 64GHz, esto es el diferencial más fuerte, porque permite medir a nivel milimétrico lo que esté por delante del teléfono.
El radar permite detectar al detalle los gestos, la dirección e intención de los mismos, esto es más avanzado que sólo con cámaras pero al mismo tiempo viene con trampa: operar en esas frecuencias requiere autorización en cada país, así que de entrada no estará habilitado para todos. De hecho, en los EEUU mismos requiere que la FCC le habilite usar más potencia en esas bandas para que Soli funcione como debe.
Google hace fuerte hincapié en que los datos de desbloqueo y reconocimiento facial no quedarán en la nube sino que en el teléfono, mucho del tema privacidad aquí, veremos qué otros detalles encontraremos en los próximos meses.
Via Google
Privacidad y Google no van de la mano. De hecho privacidad y ninguna tecnológica va de la mano.