Intel está un poquito atrasado en anuncios interesantes para sus fans y AMD le viene generando mucha molestia pero es hora de tratar de dar vuelta un poco la situación y anunciar algo en vísperas del lanzamiento de su rival.
Los procesadores de Intel de 11va generación tienen fecha de llegada para el primer trimestre de 2021 por lo que no sólo no estan tan lejos sino que pueden llegar a revivir el favoritismo contra los Ryzen 5000 de mañana.
Los nuevos “Rocket Lake” por fin darán soporte para PCI 4.0, con arquitectura “Cypress Cove”, empezando con CPUs de 8 núcleos y con clocks que, al parecer, alcanzarán unos increíbles 5GHz.
El proceso parece ser todavía el de 14nm pero sería el último uso de la marca ya que para mediados de año planean pasar todo a 10nm. Llama la atención el máximo de 8 cores cuando el flagship actual está en 10 pero seguramente es una elección estratégica para que den mejor los benchmarks de juegos (que no son tan multicore) con un clock más alto (hasta lo que dan los 14nm).