Inaccesible para los clientes, al fin y al cabo un Tesla es algo carísimo, casi de lujo, y un ID.3 también se escapa de las posibilidades de cualquier comprador “normal” de vehículos y esa es una de las razones por las que los eléctricos siguen siendo una minoría y el mercado paga por autos de combustión interna.
Pero las próximas regulaciones se estan acelerando, lo que se preveía en Europa para 2050 es ahora 2030 y 2030 son apenas diez años. En esta década la plaza de automóviles europea tiene que convertirse a eléctrica en la mayoría de los mercados y eso implica: bajar precios.
Volkswagen tuvo su gran golpe con el drama de las emisiones, la estafa a las entidades de regulación y todos sus clientes mintiendo valores sobre los Diésel, así que la conversión a EV es necesaria para mejorar la imagen y dejar eso en el pasado pero VW no puede hacerlo con autos de lujo solamente. Sus Gol, Golf, Polo y demás líneas accesibles son las más vendidas y las que deberán transicionar.
Por eso la firma alemana está encarando seriamente su “Small BEV” (Battery Electric Vehicle), autos EV para el mercado masivo y un valor entre los €20.000 y €25.000, que sigue siendo mucha plata pero mucho más accesible. Esto lo haría más barato que el ID.3 y el ID.4 y competiría directamente con la promesa de Tesla de un EV de USD 25.000 para dentro de tres años. Si es así habrá que ver qué fecha le pone VW porque de eso todavía no se habla.
La inversión de I+D para eléctricos de VW pasó de unos €60.000 millones a €73.000 millones a mediados de este mes porque, efectivamente, saben que es el único camino que les queda porque país a país, dentro de Europa principalmente, estan cambiando sus legislaciones para el 2030 donde las restricciones de emisiones de la Unión Europea harán imposible vender vehículos como los actuales, la mejor adaptación no es cambiar la eficiencia de los de combustión interna sino pasar a otra cosa y todo va en ese sentido parece.