La implementación de una red de trabajo puede optimizar considerablemente la forma en la que se ejecutan las tareas en una empresa y la gestión de los datos. En este sentido, contar con un servidor es un gran avance para poder establecer un sistema de gestión empresarial mucho más eficiente y con mejores capacidades. Pero no todos los servidores son iguales entre sí.
Como casi todo lo que se desarrolla en Internet, hay servidores tanto físicos como virtuales. Conocer cuáles son sus características, sus principales desventajas y desventajas, es imprescindible para tomar la decisión a la hora de invertir en uno de ellos en ámbitos laborales.
Por lo tanto, si te interesa saber mejor cómo se definen estas prioridades y de qué manera elegir el servidor que mejor convenga, a continuación, contaremos todo lo que deberías tomar en cuenta y de qué manera funcionan los distintos tipos de servidores disponibles a día de hoy.
Servidores físicos: qué son, ventajas y desventajas
El servidor físico se encuentra “instalado” en un centro de datos como parte de la estructura fundamental de una empresa. El empresario está detrás de su instalación, configuración, gestión y operación, así como de los gastos asociados con su alojamiento, funcionamiento, mantenimiento y reparación.
Ventajas del servidor físico
- Alto rendimiento: estos servidores ofrecen un rendimiento superior, mayor fiabilidad y eficiencia en comparación con las máquinas virtuales clásicas.
- Independencia y confidencialidad de los datos: sólo el propietario y el equipo informático de la empresa tienen acceso completo a los recursos de su servidor.
- Solución de problemas in situ: en caso de dificultades operativas, es posible resolverlas directamente en el servidor sin necesidad de desplazamientos.
Desventajas del servidor físico
- Alto costo: los servidores físicos son costosos en términos de adquisición y mantenimiento porque se requiere del aporte de un profesional en la materia.
- Necesitan espacio y condiciones ambientales específicas: no funcionan si no están dadas condiciones específicas tanto espaciales como ambientales. Considerar la temperatura y humedad del ambiente es importante.
Servidores virtuales: qué son, ventajas y desventajas
Como su nombre lo indica, un servidor virtual es la emulación de un servidor físico en un entorno virtual, ejecutando múltiples servidores virtuales en una sola máquina física dedicada. Los servidores virtuales privados o VPS son una moda actualmente.
Ventajas del servidor virtual
- Reducción de costos: los servidores virtuales permiten economizar en hardware, reduciendo los gastos de energía, refrigeración y gastos a largo plazo.
- Ahorro de espacio y dinero: a diferencia de los físicos, los virtuales son algo menos demandantes respecto a sus necesidades espaciales como ambientales.
- Flexibilidad: reducen los costos asociados a la migración y son más aptos para corporaciones cambiantes, en las que todo cambia en cuestión de semanas.
Desventajas del servidor virtual
- Rendimiento inferior a los servidores físicos: en circunstancias de máxima exigencia, un servidor virtual podría quedarse corto de potencia para administrar grandes volúmenes de información y muchos recursos informáticos.
- Funcionalidad limitada: las empresas de alojamiento virtual pueden imponer ciertas restricciones en el sitio web del usuario, como límites en el tráfico anual.
¿Cómo determinar cuál opción conviene más? ¿Servidores físicos o virtuales?
El relevamiento anterior de estas características evidencia que tanto los servidores físicos como los virtuales poseen sus propias ventajas y limitaciones. Por eso decidirse puede costar mucho.
Si tu prioridad es el rendimiento en alta velocidad y tienes cargas de trabajo muy exigentes, probablemente la elección más adecuada serían los servidores físicos. Estos ofrecen una respuesta potente, una estabilidad sobresaliente y una seguridad de alto nivel en general. Además,garantizan una operación confiable a largo plazo y ofrecen procesamiento de datos externos. No tienen restricciones y ofrecen un control completo sobre los elementos alojados.
Por otro lado, si valoras especialmente la flexibilidad para expandir o reducir tu red según el crecimiento de tu negocio, los servidores virtuales pueden ser la elección más interesante. También son capaces de satisfacer las cambiantes necesidades de las pequeñas y medianas empresas, pero resultan más fáciles de escalar en caso de que el mercado sea muy dinámico.
Al decidir entre ambas opciones, es esencial considerar cuáles son las necesidades que tiene tu proyecto y cuáles de los beneficios de estos servidores se adapta mejor a esos requerimientos.
