USB-C poco a poco se expande y transforma en el conector universal que debería ser, y no sólo porque lo podemos conectar en cualquier dirección sin equivocarnos sino porque está ofreciendo tasas de transferencia de alta velocidad y potencias que antes no teníamos disponibles.
El conector USB-C no es la especificación USB 3, vale aclarar esto, pero el conector, que es compatible con las versiones anteriores, permite también mayor potencia y la nueva especificación 2.1 (insisto, no confundir con el estándar de transferencia, esto se refiere al cable y conector) plantea potencias de hasta 240 Watts que es más del doble de los actuales 100W máximos.
Este “Extended Power Range” requerirá, como es obvio, nuevos cargadores para poder sacar provecho pero permitirá darle potencia a cualquier dispositivo conectado a nuestra PC con corriente de 5A máximo y voltajes que van de los 20V actuales hasta 48V.
Con esto se podrá cargar a velocidades extremas pero la idea me sugiere que tanta potencia es perfecta para GPUs externos para que tengan consumos más cercanos a una PC de escritorio y entregar performances semejantes. Las Notebook que no son gamers podrán extender sus posibilidades en ese sentido.
También discos externos, consolas, smartphones, etc. Aunque, como es obvio, cada dispositivo tendrá que ser compatible porque no toda batería soporta semejante energía para cargarse y no explotar en el proceso.
