Hay muchas marcas de teléfonos, pero la realidad es que los que más se venden son muy pocos y eso hace que el mercado se concentre. Se calculan que unas 500 han desaparecido y no nos referimos solamente a empresas grandes y llamativas sino a muchas de esos proyectos que trataron de crear una marca y fracasaron.
Por esta razón son tantas, sí, podemos ver a LG como uno de los grandes fabricantes que se fueron, hasta Nokia que ahora quedo como marca de HMD pero que ya no es la empresa finlandesa, desde 2017 a la fecha unas 500 han desaparecido.
Muchas de estas marcas son de mercados locales pequeños, el número de marcas globales sigue siendo el mismo, 30, no cambia mucho, todas las demás son producciones menores localizadas. Es en esas donde la mayoría muere porque no puede competir con el resto.
Counterpoint Research hizo el estudio donde identificó momentos críticos como la crisis de Supply Chain de 2020 por la pandemia como el clavo final en el ataúd de muchas marcas que venían luchando por un pequeño espacio en un mercado saturado:
El segundo momento crítico parece haber sido el comienzo de la guerra en Ucrania que también significó un impacto sutil en otras industrias, pero fuerte en esta. Curiosamente los teléfonos reacondicionados de marcas importantes crecieron un 14% en 2021, es decir, se compran menos teléfonos baratos “alternativos” y más “de marca” pero “refurbished”.
La venta de equipos nuevos ha ido cayendo año tras año, el 2022 llegó al 12% lo que es una enorme diferencia.
LG, por ejemplo, llegó a perder 4.500 millones antes de cerrar su división de celulares en 2021, sin embargo el mercado le abrió la puerta a varias marcas chinas como Xiaomi, Viv y Oppo, o proyectos distintos como Fairphone, todavía quedan más de 250 marcas de las que seguramente ninguno de nosotros oyó jamás.
