Samsung entiende que su serie Galaxy S, tope de línea, no es para cualquiera, y por eso ya es la segunda vez que opta por presentar una versión “mini” de estos teléfonos. Ya tuvimos el Samsung Galaxy S3 mini, y ahora tenemos el Samsung Galaxy S4 Mini, anunciado en abril.
El teléfono tiene una pantalla Super AMOLED de 4.3″ con resolución qHD. El procesador es un dual core de 1.7Ghz, tiene 1.5GB de RAM, una cámara principal de 8MP y la frontal de 1.7MP, y viene con la última versión de Android, Jelly Bean. Con respecto a la conectividad, se imaginarán que es bastante completo, WiFi 802.11 a/b/g/n, Bluetooth 4.0, GPS + Glonass, e infrarrojo, algo que me parece bastante útil (para juguetear con televisores ajenos por lo menos 😀 ) y no muchos teléfonos hoy en día traen.
El teléfono mantiene el diseño del S4 original, aunque por supuesto en tamaño reducido. Ofrece también algunas de las funcionalidades del hermano, como Sound & Shot (para grabarle audio a alguna foto), Panorama Shot (fotos panorámicas), Story Album (agrupa automáticamente las fotos en un mismo album), Adapt Display (se ajustan las condiciones de la pantalla según la situación y/o aplicación que se esté usando), y otras.
Se ofrece en colores White Frost (blanco) y Black Mist (negro), y está disponible en todas las operadores. Los precios variarán según el plan, pero los puntos de partida son Claro a 3099$ con plan de 250$, Movistar a 2899$ con plan de 299$, y Personal a 3999$, con plan de 249$.